Grados de peligro
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El problema de capas débiles persistentes debe ser evaluado con atención. El problema de nieve venteada reciente debe evitarse.
En algunos lugares, los aludes pueden desencadenarse en el manto débil de nieve antigua al paso de un solo montañero. Especialmente en las laderas umbrías inclinadas en cotas altas y zonas de alta montaña, y en las laderas soleadas inclinadas en las zonas de alta montaña. Los aludes son como mínimo de tamaño mediano. Los "whumpfs" y las fisuras que propagan indican esta situación. El número y la dimensión de los lugares peligrosos aumentarán con la altitud.
Las placas de viento más recientes son en parte inestables. Precaución en las laderas umbrías inclinadas en cotas altas y zonas de alta montaña.
En las laderas solanas muy inclinadas, en el transcurso de la jornada son posibles avalanchas de deslizamiento basal y purgas de nieve húmeda.
Se recomienda una elección cuidadosa del itinerario. Las laderas inclinadas deben ser atravesadas de uno en uno.
Manto nivoso
pp.7: zonas de poca nieve en entornos con mucha nieve
pp.6: frío, nieve suelta y viento
En la parte central del manto de nieve se encuentran capas débiles de cristales angulosos. Especialmente en las laderas umbrías por encima del límite del bosque, y en las laderas soleadas en altitud. Las observaciones sobre el terreno y los perfiles estratigráficos confirman esta situación.
Las placas de viento son en parte aún inestables. Ellas no se han unido bien con la nieve antigua sobre todo en laderas umbrías. Con las temperaturas suaves y la radiación solar, el manto de nieve se consolidará.
En el transcurso de la jornada el sol y el calor causarán una ligera humidificación del manto de nieve. Con la subida de temperaturas, en los últimos días se ha formado una costra superficial.
Tendencia
El problema de capas débiles persistentes requiere atenciónn. Atención al problema de nieve venteada reciente.